Desde los pasillos de la Institución Educativa “Augusto E. Medina” de Comfenalco Tolima en Ibagué, surge una historia de perseverancia y éxito que se ha convertido en ejemplo para todos los estudiantes. Sebastián Buriticá, un joven tranquilo y reservado que llegó desde Bogotá a terminar sus estudios en esta institución, nunca imaginó que un día su nombre resonaría como el mejor puntaje del ICFES no solo de su colegio, sino como uno de los mejores del territorio tolimense. Su logro, es el reflejo de años de esfuerzo, apoyo familiar y el compromiso de una institución de alta calidad.
«Cuando vi mi puntaje, no lo podía creer», recuerda Sebastián, con una mezcla de humildad y asombro. «Mi mamá estaba tan emocionada como yo. Ella siempre ha sido mi mayor apoyo», cuenta.
El éxito de Sebastián no fue casualidad. Detrás de ese puntaje, se encuentra el trabajo constante del Colegio Comfenalco y cada uno de sus docentes, donde la disciplina y los simulacros tipo ICFES son una parte esencial de la preparación académica. «Los profesores siempre estuvieron atentos a nuestras dudas y nos motivaron a dar lo mejor», dice Sebastián, destacando la dedicación del equipo docente. «Algunos profesores me ayudaron a superar mis miedos y a manejar la ansiedad (…) Eso hizo una gran diferencia en mi desempeño» añade.
En el colegio, Sebastián encontró algo más que aulas y libros; aquí, conviven entornos escolares bien equipados, herramientas tecnológicas y el enfoque práctico del aprendizaje que hicieron que conceptos complejos se volvieran mucho más claros. Algo que resalta es que lo más valioso para él fue el ambiente de confianza y motivación que se siente en cada rincón de la institución. «Aquí, uno no solo se prepara para los exámenes, sino para la vida», afirma.
Sebastián, con su voz pausada pero llena de convicción, envía un mensaje a quienes buscan una educación que transforme vidas: «El Colegio Comfenalco es una gran elección. La disciplina y dedicación nos preparan para grandes logros. Si aprovechan las oportunidades aquí, pueden llegar muy lejos». Hoy, su historia inspira a cientos de estudiantes en cada aula y reafirma la misión del Colegio Comfenalco: formar jóvenes íntegros, capaces de alcanzar todos sus sueños.
